Con soplo amigo, gracias, acariciadle brisas! Sus blancas alas jamás huyeron ante el contrario.
sylphides
Hombre de soledad y misterio, nadie le ha visto sonreír.
Suspiros nunca brotaron de su pecho altivo.
Como el infinito: el poder del pensamiento, fuerza oculta en el fondo de la mente.
Gracias por traernos a pascal, uno de esos pensadores del s. xvii y del renacimiento que abren época hacia lo que va a venir después, con las luces y el pensamiento de las ciencias naturales.
sylphides, metida a poeta.
Creo que Pascal dio forma a muchas de las inquietudes del hombre moderno. Como científico (construyó una calculadora con doce años), vio por primera vez al hombre en medio de un cosmos cada vez más grande, cada vez más inhóspito, y expresó su temor ante la nada.
Ciertamente, no fue el primero en hablar de la nada. Kant había hablado de cuatro tipos de nadas en su Analítica Trascendental, que se correspondían con los distintos tipos de ser. Pero solo con Passcal el hombre se vio por primera vez perdido en los abismos del espacio y del tiempo. Imaginó mundos enteros contenidos en motas de polvo, y se aterró de su propia insignificancia.
Perfeccionando una forma mundi que en su época solo estaba esbozada, el pavor de Pascal es, sustancialmente, el nuestro. La impotencia de la razón, la "rationis egestas" lucreciana es la que podemos sentir en esta época que Edgar Morin ha caracterizado por la complejidad, en que la mente humana parece ya incapaz de abordar los límites de su propio conocimiento.
Un abrazo, Otredad. Y gracias un día más.
Un abrazo, Otredad. Y gracias un día más.
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