viernes, 7 de marzo de 2008
la subida del precio del crudo
Ayer el precio del crudo llegaba hasta los 104 dólares como consecuencia de la decisión de la OPEP de no incrementar la producción (EXPANSIÓN pág 29 del 6 de marzo).
Esta ha sido la causa de que el presidente del BCE, Jean Claude Trichet, ante la amenaza inflacionista tal como publica hoy EXPANSIÓN pág 38, decidiera mantener los tipos de interés en la eurozona, alimentando así, una nueva apreciación del euro hasta los 1,5378 dólares, que cuando se corrija inyectará más inflación todavía a la economía europea. S&P llegó a un mínimo desde 2006 en los 1.304 puntos, y el Ibex35 se situó por debajo de los 13.000 puntos (CINCO DÍAS pág 24).
Las bolsas caen a pesar que la economía crece y las empresas ganan más dinero. Ello se debe a que ha aumentado la falta de confianza sobre la gestión de la economía por parte de la Fed y del BCE. El precio del crudo ha reflejado enseguida esa mayor desconfianza, el dinero administrado por los bancos de inversión se ha intranquilizado y los analistas han aumentado la posibilidad de un aborto de la recuperación o rebajado las previsiones de crecimiento económico.
En realidad, la comunidad de analistas está votando contra la gestión de todos los organismos económicos internacionales y los supervisores de las economías de la OCDE. La subida del precio del crudo no se debe exactamente, como se ha dicho, al crecimiento de la demanda de China, India, y otros países emergentes.
La mayoría del consumo de petróleo está concentrado en los países de la OCDE, para mantener tanto su capacidad industrial, como el nivel de vida de los ciudadanos. La fuerte y rápida subida de precios se debe más bien a una combinación de noticias desfavorables sobre los niveles de reservas, producción en nuevos yacimientos, y el futuro del conflicto en Venezuela. Sin haber ningún problema real por el lado de la oferta, los especuladores han agitado todas estas expectativas negativas.
Como el precio del crudo se mide en dólares, el efecto de la subida es mayor cuando se traduce en euros depreciados. El efecto sobre las economías europeas depende no sólo del coste de la importación de crudo, sino de la rapidez con que se haya producido la subida y, sobre todo, del tiempo de permanencia del precio en niveles elevados y del grado/intensidad de utilización de energía que necesita cada economía por unidad de producto.
Si al final se produce un shock petrolífero, las cifras de crecimiento económico e inflación terminarían siendo inferior y superior, respectivamente, a las establecidas en los Presupuestos vigentes. Desde luego, el gasto público no podría satisfacer tantas promesas como se han hecho en todos los países.
La Fed no se atrevería a mantener los tipos de interés en su nivel actual, para no estrangular la posible recuperación económica de EEUU, mientras que el BCE no se atrevería a bajar los tipos de interés, para no incentivar la inflación en la UE. Así que, todos quietos, en espera del final de esta tregua en la que intervienen factores geopolíticos e intereses del lobby del petróleo.
Andrómeda
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario