lo dijo Aura
Oh! cada vez esto del amor, toma tonos más complejos, he estado leyendo a Julia Kristeva, Piscoanaista donde extiende la hipotesis, que todo problema humano radica en una falta de amor, presente o pasada, real o imaginaria... tema tan complejo como interesante...
Un beso grande Mariposa!
Que heroso lo que dejaste en mi post, eres de una sensibilidad unica
Ahora un abrazo apretado
Aura
Estimada Aura:
Julia Kristeva es una psicoanalista, teórica de la literatura y del feminismo y de la semiótica. Me alegra mucho que la traigas aquí y la menciones.
Estoy un poco bromeando también con cierta crítica doctrinal y psicoanalítica de lo que es la concepción del amor.
Pero me obligas también a reflexionar y a tener en cuenta el problema desde un ámbito complejo.
Gracias querida amiga, un beso!
En el amor siempre hay una "sublimación" que opera la introyección de objeto libidinal dentro de la persona y la mistificación de ésta. Pero lo importante es el proceso de "encarnación" de otra cosa.
un beso!
lo dijo Pasolosdías
Supongo que hablas del amor erótico, y cierto es que si se hace ley sobre él nos llena de calma. Pero no es así, el amor no puede ser objeto de una normalización universal, cada uno lo goza, siente o sufre a su modo, más o menos similar que el de los otros.
Una reverencia.
lo dijo Andrómeda
Estimada Clitemnestra,
en este caso sería la "encarnación" de la Ley, el vehículo que opera el transporte del objeto libidinal, por decir así.
Lo importante es que el lazo amoroso no se pierda y que continúe.
Reconocer que hay un objeto transgresor es como reconocer el crimen del incesto. El encierro dogmático en sí mismo.
Estimado Pasolosdias, que el goce es el objeto libidinoso por antonomasia y que lo es pero necesita ser llevado hacia otro objeto, es lo que le digo a Clitemnestra.
No se trata sólo de llevarlo a la Ley, a la institución investida de poder, aunque esto es lo que se ha hecho con la sublimación del amor la mayor parte de las veces.
Otras tantas no, el crimen del incesto, la prostitución, el aborto, la separación, son otras salidas que desvían el amor de sí mismo.
El amor por tanto tiene que ver con la Ley, sí, pero no con una forma igual para todos, de acuerdo ahí. Pero sí con un sentido posible de prolongación, de transmisión y de normalización de sí. La transmisión opera también por el culto de los antepasados, hay quien habla de la historia, quien se vale de la autoridad y de la fuerza del grupo por tradición.
Apelar a la historia es una forma de unirse, aunque sea conservadora, cuando no se puede ver claro un futuro o tal vez lo vemos pero con miedo.
Gracias por vuestra visita, un abrazo a ambos.
Del amor se habla tanto...Creo, como Shopenhauer que es un "engaño de la naturaleza", dulce a veces, cruel otras, pero cuyo objetivo procreador no pierde de vista. Y, como los amigos de la escuela de Frankfurt, creo que ciertamente está sometido a la historia y con ella varia su ser, su esencia y sus manifestaciones. El amor, de hecho, puede no ser; dicho de otro modo: es fenoménico por mucho que nos obstinemos a tratarlo como si perteneciera a un rango superior. Cristianismo y Mahayana, el amor como el verdadero cemento que une el universo, que une los tiempos.... Y nuestro discurso suele estar motivado por un cristianismo vergonzante.
Pero es bello hablar de estas cosas...amiga mía.
Un abrazo.
Estimado amigo:
Creo que sí, que se mide con la historia y con el proceso que se crea a través de ella.
Pero hay otra inercia hacia el futuro, que es lo que lo mantiene vivo.
No son sólo razones biológicas sino culturales. No es sólo un "engaño" pero sí se trata de un "imaginario" cultural, necesita de una creencia o de un valor que le dé sentido o significación.
Gracias por pasarte, un beso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario