Hola José Carlos,
Permíteme hacerte una corrección relativa a tu conclusión extraída de tu visita a la seguridad social.
Mi experiencia no es que la gente agote su prestación por gusto, sino que si eres recién desempleado TE RECHAZAN EN LAS EMPRESAS porque dicen que no tienes suficiente estímulo para trabajar. Esto me pasó varias veces en mi carrera profesional; me preguntaban cuánto me quedaba de paro, y si decía que me quedaba mucho NI ME COGÍAN EL CURRICULO. Así que tenía que mentir y decir que había dimitido, y que no tenía prestación, e inventarme otras milongas para conseguir que me aceptaran el CV.
También me preguntaban cuánto percibía de prestación, para valorar si me sentiría cómodo trabajando por lo mismo o menos de lo que percibía de subsidio.
Ellos querían gente desesperada para trabajar, con poco poder de negociación y que necesitara el trabajo, para de ese modo poder pagar menores salarios y exigir horas extras gratis. Y por supuesto, eran del tipo de empresas que te miraban mal si te cambiabas de curro por tus malas condiciones.
Todos los que conozco han pasado por ello, y te avanzo que soy economista, no operario en una fábrica ni sindicalista de la UGT.
Por regla general debería evitarse contratar a desempleados de larga duración porque la incertidumbre es mayor, como bien dices, pero la teoría falla en España. ¿Por que falla esa teoría? por la misma razón por la que somos número 1 en enchufismo en el mundo; porque el nivel es muy homogéneo (para mal) y da lo mismo fichar a 1 genio que a un tonto: van a hacer el mismo trabajo de perfil bajo. Si vas a jugar al patadón en fútbol, le sacarás el mismo rendimiento a un centrocampista que sea un virtuoso que a un leñador. Por eso hablan de sobrecualificación.
Además piensa que cuando una persona tiene por delante 2 años de prestación, y acepta un trabajo, pierde esos 2 años de prestación (no es exactamente así, pero esa es la esencia del decretazo), y cuando pierda el trabajo aceptado sólo tendrá prestación por lo generado por dicho empleo.
José Carlos, tu blog es un oasis en un desierto de ideas y también por qué no, de ética y deontología profesional. Pero no quizá aquí te estás dejando llevar por teorías que no consideran NUESTRA PIRAMIDE DEMOGRAFICA. Un modelo es una simplificación de la realidad siempre.
Los que somos de la generación de los 70 somos una multitud, todos universitarios; todos hemos tenido que competir mucho más que los demás para acceder a puestos de trabajo con remuneraciones menores a las de un camarero o un albañil, y con horarios indeseables. Las empresas que nos contrataban se podían permitir estas condiciones porque había mucha oferta de universitarios, y poca demanda. La productividad de esos negocios era mínima; el emprendedor ganaba el dinero a base de cobrar subvenciones, defraudar al hacienda y explotar a la gente,sin tener un modelo de negocio competitivo. Claro que España ha crecido y progresado, pero piensa que el 80% del empleo lo generan pymes, y que las pymes siguen ganando su dinero así. ¿En serio te crees que la gente prefiere agotar su prestación por gusto? ¿no será que tardan muchos meses en encontrar trabajo?
Cuando pienso que con mis impuestos se becan a los jóvenes de ahora viajes gratis al extranjero para aprender idiomas, y se becan masters (yo pedí 2 prestamos para hacer mis 2 masteres), y que mi generación no ha tenido derecho a nada de eso, y luego lees que somos unos caras que agotamos la prestación, pues... ¿qué quieres que piense? ME PARECE INDIGNANTE.
Gracias a Dios, y a que llevo currando durante años 12 horas diarias como mínimo, a la vez que estudiaba por las noches estos 2 masters y algún idioma , mi carrera ha progresado (tengo mucha vocación profesional),y no es que me vaya superbien, pero avanzo. Si me queda algún derecho, ese el el de percibir mi prestación de paro QUE ME HE GANADO; y yo NO quiero agotarla, como casi NADIE que conozca, pero tampoco quiero perderla aceptando cualquier mierda de curro que te ofrezcan intentándose aprovechar de tí (¿es el desempleo involuntario antiético cuando se quieren aprovechar de tí?).
Cuando estuve en paro allá por el año 2003, recuerdo que tenía 6 meses de paro, y eché mas de 3000 CV en Madrid siendo apenas recién licenciado. Encontré trabajo por una ETT cuando me quedaba sólo 1 mes de prestación. Créeme: gasté mucho tiempo y dinero dinero en ello (porque soy de otra comunidad), y no tuve ayuda de la administración. Incluso corrí el riesgo de que me llamaran del INEM durante X días para ir a firmar a primera hora de la mañana, como método contra el fraude... Y si no hubiera podido ahorrar durante mi prestación, no podría haber aceptado un trabajo en Madrid Y EMPEZAR DESDE CERO (necesitas pagar un alquiler, un abono de transporte, etc... antes de cobrar tu sueldo).
¿Quieren acabar con el paro? PUES DEN FACILIDADES A LA MOVILIDAD GEOGRAFICA (nacional e internacional, en la UE) Y ALQUILERES BARATOS, que mejoren el transporte público a centros empresariales, y que centralicen todas las ofertas de trabajo, y se permita el acceso gratuito a las mismas en tiempo real, y de este modo la gente lo tendrá más fácil.
José Carlos, piensa que la prestación es un coste de agencia: queremos esa prestación porque no confiamos ni en empresas ni en políticos. Seguramente hay gente que se aprovecha, pero dañar a muchos para que unos pocos no se beneficien, y de ese modo dar carta blanca a las empresas para que contraten como quieran (a pesar de estar en situación económica saneada)... Ojo que soy defensor de la productividad y del cumplimiento de objetivos, pero ya me han engañado demasiadas veces, y ya jode mucho tener más ética que la empresa que te contrata.
Seguro que hay muchas más casuísticas que las que te expongo, y que me quedo corto, pero por eso me parece atrevido el juicio que has hecho.
Muchas gracias por tu blog, y perdona la chapa que te he soltado
@ pocholo perdona por ofenderte, tu eres justo la persona que justifica la existencia de un seguro de desempleo. Entiendo bien como te sentías con tu sobrecualificación yo también la sufrí al principio de mi carrea cuando una gran entidad financiera me dejó fuero de un proceso de selección para un programa de ejecutivos por estar estudiando el doctorado. El psicólogo pensó que eso señalaba una actitud reactiva y muy averso al riesgo para buscar una plaza en la universidad. Aquella historia refleja bien la incertidumbre y parece que el hombre se equivocó aunque a lo mejor era el destino ya que si hubiera entrado en aquel programa hoy no sería un economista observador, ¿quién sabe? Versionando a Guillermo de Baskerville en el Nombre de la Rosa diciendo a su discípulo “qué sencilla sería la vida sin incertidumbre pero que aburrida y que insulsa”