jueves, 31 de enero de 2008

miles davis & john coltrane

Miles Davis & John Coltrane- "So What"

lo dijo Pasolosdias


Gracias a vosotros.
Chema:
Tengo las tres versiones del Night in Tunisia, la de Davis a duo con Parker. Ésta version es perfecta, pero Parker en solitario vuela más libre, y aunque tropiece. El de Guillespie quizá sea el más auténtico, ya que este mofletudo compuso el tema. Todos los que nombras me gustan -gracias al Blue rondó a la turca y al Take five de Desmond el jazz gusta a mayorías-, y también Chet Baker, Stan Getz... el jazz no se acaba nunca.


Para quien quiera disfrutar del tema que dice Chema he aquí el enlace, la simpatía de Miles Davis y la elegancia de Coltrane, So What:

El Jazz no es comprensible, he leído libros y pequeñas enciclopedias sobre el tema y no sé nada, es música para disfrutar. A mí me gusta escucharlo cuando esoy ligeramente puesto, manías que tiene uno.

lo dijo Gargantúa


Ayer estuve visionando en YouTube vídeos de Ellington, Max Roach y Dave Brubeck, durante un rato que mi ajetreada vida contemplativa me dejó. Insólita coincidencia.
Por cierto, deja de hacer el ganso en el blog que tú y yo sabemos, que cuando te vea te voy a hacer un free jazz el el ojet.....

miércoles, 30 de enero de 2008

alice cooper

Alice Cooper - Serious


Lo dijo sylphides a ange:
"Quien olvidado de si mismo sana ?
Quien supiera descifrar tu enigma!
Despellejando su alma porque todo pasa (Oh! Dioses del olvido!)"
Tan sin alma y sin cuerpo, sin color ni beso, la palabra iba suelta y la dejé pasar.
Gracias por traernos estas palabras hermosas!


lo dijo sylphides a zarza:
El baile es como mudarse sin dejar de ser tú, con la fidelidad constante de cambiar.
Precioso tu sentido lírico, un abrazo!

Estaba aguardando el primer deseo para ser enseguida. Porque se desprendió del quiero, del deseo.
Un bonito poema.


martes, 29 de enero de 2008

"Whole Lotta Love"

LED ZEPPELIN "Whole Lotta Love"


lo dijo otredad


"El corazón nada dice tampoco. No está apenado, ni dichoso..."
Yo no creo que debas arrepentirte ni mantener esa visión negativa de tí. Esa parte de nosotros, la que nos distrae del resto,nos desborda entre esa multitud, y si se la desoyera,quién sabe si no sería peor al final de todo el resultado, quizá un acompañamiento falso y molesto.
"mejor no amarse
en las nubes,
flotantes. Busca pesos,
los más hondos, en ti, que ellos te arrastren
a ese gran centro donde yo te espero."
Das estupendos frutos, enormes.
Un fuerte abrazo

lo dijo Vagabunda


Precioso poema
Un abrazo

lo dijo sylphides


Queridos amigos:
Vuestra nobleza me ha conmovido.
Pasolosdias, creo que tenemos jazz para rato, y esa vocecilla para mí no tiene comparación, todo ese sufrimiento ella lo transformó en dignidad y misterio.
Otredad, gracias, siempre me sorprende tu capacidad de comprensión. Creo que la poesía es la que viene a mí y no yo a ella, tal vez me viene a recoger o a darme otra comprensión de las cosas.
Vagabunda, gracias, tú siempre nos deleitas.
Muchos besos y abrazos!

lunes, 28 de enero de 2008

el corazón solitario



lo dijo Jardin perfumé
La noche, la gran masa trémula, el mar, la tierra vencida sobre la playa, son metáforas que pueden darnos el estar ya no de pie sino tendidas y arrojadas.
bellos poemas, un abrazo!


Querida amiga:
¿Desdeña el solitario a aquellos de quienes se separa? ¿Busca aquí sólo su propia explicación, su paz propia, el retorcido placer del que no arriesga nada y nada pierde?
Exactamente para lo contrario ha subido hasta aquí. Para olvidarse de la parte de sí mismo que lo distrajo a menudo entre los otros.
No volverá a mezclarse. Antes procuraba el querido aislamiento; ahora, con los ojos avanza por una ancha avenida vacía.
El corazón nada dice tampoco. No está apenado, ni dichoso... y lo recibe como a cada uno de sus invitados al jardín: la solitaria de mí piensa que quizá otros, por dentro o por fuera —quién sabe—, estuvieron mejor acompañados.
Gracias por venir, un abrazo!

domingo, 27 de enero de 2008

naúfragos de los cielos


Te sentirás hundir despacio,

hacia lo alto, en la vida del aire.
Y nos encontraremos

sobre las diferencias invencibles,

arenas, rocas, ya solo

nadadores celestes,

náufragos de los cielos.



lo dijo sylphides


Me sobran
los ojos y los labios,
en este mundo tuyo.
Para sentirte a ti, Afrodita Gourmandise,
no sirven
los sentidos de siempre,
usados con los otros.
Hay que esperar los nuevos.
Se anda a tu lado.

en la orilla del vuelo


Yo me quedaré en la orilla de los vuelos, de los sueños.
Porque sé que adonde estuve

ni alas, ni ruedas,

llevan.


Las almas iban como alas sosteniéndose solas

a fuerza de aleteo desesperado,

a fuerza de no pararse nunca,

de volar, portadoras por el aire, en el aire, de aquello que se salva.


yo me quedaré en la orilla
de los vuelos,
de las estelas.
Porque no sé en donde estuve
ni alas, ni ruedas, ni velas
me recuerdan.


sylphides

posición "wu chi"




lo dijo Daven


Gracias Monsieur Mapache:

Aunque solo sea por usted, explicaré ampliamente hasta donde llega mi experiencia como llegar a esta posición.
Cada posición es un reto contra nuestra des-naturalización. Un traje, una corbata, una maleta que debemos dejar aparte para dedidar un momento todos los días a volver a nuestro origen zoomórfico.
Agradezco su gentileza y tenga por seguro que su propio cuerpo y mente le devolverán esta dificultad con creces.
Cada día practico Chi Kung durante media hora. Soy más feliz, me siento más libre, y más firme sobre la tierra que piso. Desde mi punto de vista científico materialista, no hay ninguna magia en todo esto. Se trata de explorar aquello que no funciona y solucionarlo.
Un cordial abrazo

Lord Gordon Byron, socialiste

lo dijo sylphides




Estimado señor:



Mientras teníamos el prejuicio de la vida, abrazábamos un error que nos ponía en pie de igualdad con los otros...



Pero nos hemos evadido de la especie...



Desacostumbrados de ser hombres, rompiendo nuestra osamenta, nos ha reducido a una existencia fofa, chusma invertebrada extendiéndose sobre la materia para mancharla de baba.
Por otro lado, el ser mismo no es más que una pretensión de la Nada.
Y es que no hay vida más que en la falta de atención a la vida. El espíritu se aja al acercarse a la salud: el hombre es inválido o no es.
Pero continúa prefiriendo su propio fracaso a la naturaleza que fracasa eternamente en la salud.
Suya afectísima.

lo dijo Daven

Estimada señorita:
Desde luego que estoy acostumbrado al lenguaje antitético, pero esta vez creo borda el funambulismo. Leo con temor que atraviesa con palabras el mismísimo vacío. Y hay una preguntas éticas ineluctables ¿Por qué? ¿Hacia donde? ¿A quién se dirige? ¿Cuál es su camino?
chusma invertebrada extendiéndose sobre la materia para mancharla de baba. Acatando esa consciencia ¿No es una invitación al suicidio?. Demasiado rencor.
El ser mismo no es más que una pretensión de la Nada. ¿Ha llegado en su manual de filosofía a Sartre? ¿Volvemos a Platón? ¿Somos y vivimos entre apariencias?
Pero continúa prefiriendo su propio fracaso a la naturaleza que fracasa eternamente en la salud. Todos esos "eternamente" tienen vicios de absoluto, de ser así no debieran ser percibidos. Como no es percibido el gobierno de la no-acción. Siempre existe el equilibrio entre dos vértigos: Existir y no existir, silencio y sonido, orden y caos. En Oriente a esa Unidad la llamamos Tao. Pero no es por su nombre por lo que tiene representación, la llamamos por llamarla de alguna manera. Y somos consecuentes. Es la madre de todas las cosas. No observar el Tao es dirigirse directamente al fin, a veces mediante el funambulismo.
Volvamos al simple pensamiento antitético, sin vicios de absolutismo:
"Si no existiera el sol no distinguiríamos la luz de la oscuridad, salvo por el brillo de las estrellas".
Heráclito de Efeso.
El vicio achacado al Obscuro es precisamente su gran virtud. El logos ígneo que se expresa con la claridad de los emancipados. La consciencia, ese accidente de la naturaleza, es una emancipación.
Nada más tengo que decir.
Si no va a practicar "Abrazar el mundo", puede depositar sus comentarios, pero no serán contestados.
Así es la ley en esta casa.
Lord Gordon Byron, Libertos
lo dijo sylphides
Esta introducción creo que era necesaria hacer y agradezco su respuesta, no exenta de contrastes. La filosofía china es una filosofía práctica y del cambio, en eso consiste su sabiduría.
sylphides, ex-liberta
lo dijo Vagabunda

Me apunto. Seguiré hasta donde mis fuerzas me lo permitan, pero por intentarlo que no quede que no soy yo de rendirme ante ningún desafio.
A sus ordenes maestro.

sábado, 26 de enero de 2008

Sevilla





























































































































































































































































































































































































Bergman, Truffaut, Woody Allen, Fellini, Lars Von trier, Buñuel






















Estimados Pasolosdías y Firmin:






"Gritos y susurros", "Persona", "el huevo de la serpiente", "la hora del lobo", son otros títulos de su filmografía, que se pueden ver, aparte de los que vosotros bien mencionáis.

De Bergman aunque parezca un director serio sus diálogos están para mí llenos de vida y en él todo inspira un sentido justo de la realidad.




Lo que tiene Ingmar Bergman a diferencia de Truffaut es que si en éste siempre hay al final la sombra de un crimen pasional que acecha al amor y a la pareja cuando se encierra en sí misma, Bergman consigue superar este dolor siempre con la conversación interior y con la inteligencia, aunque sus personajes no pueden liberarse de esa situación ni salir de esa realidad encerrada, pero al menos pueden liberarse a ellos mismos a través de su retrospectiva profunda del alma.
De tal forma que el amor aunque termina, tampoco termina del todo, al decirse “ya no te amo” siguen conversando y al mismo tiempo salvan así la situación del desamor y llegan, tal vez, a la separación final o a la unión, pero de un modo natural o pacífico, sin desmesura, aunque siempre hay algo de violencia contenida y aireada en ciertos casos límites, pero que deriva por una suerte en la posibilidad de pedirse perdón.






Este cine tan psicológico e introspectivo no es tampoco como el cine de Fellini en que la vida termina al final como la representación de una comedia donde el ser se salva en el papel que representa en función de la colectividad, donde el hombre solo no es nada y se salva en unión con los otros, y de ahí en parte al diluirse en lo colectivo, su incapacidad para entender su fatal destino, para comprender a su alma. Aunque desde luego, Fellini encuentra una forma de redención en ello, en la difuminación del yo en el alma de la colectividad.






Y lo que pasa en Bergman es que su cine también deriva hacia eso, en sus ultimas películas, hacia esa representación y papel que se juega en la sociedad como colectividad, aunque siempre para él el individuo en soledad y en libertad son principios que sostienen todo su entramado argumental, como dice Jardín Perfumé, y eso ya nos dice algo de dónde encuentra Bergman el fundamento más importante para que pueda curarse el ser humano en su mente.






Gracias Firmin, no he leído a Castellet pero sí tengo referencias de él a través de otros filósofos y creo que ese libro debe ser muy ameno e ilustrativo.






Y Pasolosdias, también me gustaría nombrar a Woody Allen aquí en esta lista de directores, cuyo cine se caracteriza como el de Bergman por ser un cine psicológico e introspectivo y en él casi siempre se da la trangresión de un norma o un tabú pero enseguida lo desmitifica como si fuera una ironía o una broma del destino, el cine de Allen juega también con el papel del individuo en sociedad y en la familia, y los sentimientos para él los convierte en algo que juega un papel relevante también, pero más que darle ese carácter finalmente opta por la ironización de esa trascendencia, por la relativización de todo, por eso Woody allen es uno de los directores que nos quedan de esta herencia de Bergman






Un gran beso para los dos, felices días!






lo dijo otredad







Tu post me recuerda la gran deuda pendiente que tengo con la mayoría de las películas de Bergman.
"lo necesito ahora para mí, para conocerme a mí misma." Lo lograrás.
lo dijo Firmin







qué charla más agradable, aunque un poco melancólica. Un abrazo para todo el grupo.






lo dijo sylphides






Siempre como en todo hay un momento para ir conociendo y no siempre gustará del mismo modo, en parte hay que tomar distancias para poder interpretar bien la escena del cine y compararlo con la vida autobiográfica.
Gracias, Otredad y Firmin, sois vosotras y todos vosotros los que hacéis agradable esta narración y me siento en deuda, como el otro día decías Firmin.
Un besito!






lo dijo Pasolosdias






Sylphides, hablas de Truffaut, ahí me has dado, antes que los 400 golpes me gusta hasta el límite de la obsesión Jules y Jim, ¿la has visto? Yo 3 o 4 veces, y cineastas como Aristarain le homenajean por esa película sibilinamente. Y Fharenheit 451... Me gustaría saber qué opinas de estas dos películas que sin ser tan personales guardan su sello inconfundible.












Truffaut ve en el amor un crimen muchas veces, tal vez porque es una pasión que contiene en ella la huella de un incesto, porque se vuelve al encerramiento de uno mismo.
Sólo triunfa la pareja para él cuando ambos llevan un camino juntos hacia fuera de ellos y obtienen un resultado, y no se encierran en ellos. Pero siempre hay la huella de un crimen, como de un pasado ancestral, de un retorno oscuro al origen.






En el caso de jules y jim lo que me llama la atención es que el novio alemán es capaz de aceptar el divorcio, es decir, de controlar sus pasiones mentalmente, como buen alemán, mientras que el novio francés se comporta como el típico latino, su orgullo no puede reconocer que su mujer ya no le ame, y creo recordar que terminan muriendo arrojando el coche en el que van hacia el vacío, como el fin de la contradicción misma en que viven sin resolución. El alemán que creo es jules se refugia en su hija, que es lo que llena al final su amor y en su afición a los insectos y en el amor a la naturaleza y el paisaje saliendo de esa fugacidad en que consiste la vida en paris.






De truffaut he visto varias peliculas ademas de esa, "Vivamente en domingo", "el amante del amor", pero realmente he de decir que se me olvidan las peliculas despues de verlas, tendré que volver a verlas otra vez.






saludos vivamente!


click to comment
lo dijo Vagabunda


Yo solo vine a leerte y dejarte un saludo. Mis conocimientos cinematograficos no me dan para poder hacerte un comentario digno. Solo te diré que contigo voy apendiendo.
Gracias, un beso.


Lo dijo sylphides a Vagabunda:



Gracias, niña Vagabunda, yo estoy también casi aprendiendo ahora, no creas.
Me gustaría también decir algo sobre otro director que están entre mis preferidos, aunque polémico también en su forma de ser entendido, se trata de Lars Von trier, el director danés.


Ví alguna película de Lars von Trier (como “Rompiendo las olas”) y habla sobre el poder mental que tienen algunas personas para poder atraer a otras. Hay una persona que le hace mucho daño a otra sólo porque ella está frustrada y paralítica. Y a veces esto ocurre con aquellas personas que son más sensibles o que no entienden los convencionalismos sino que sólo miran a sus sentimientos.


Su plantemiento original consiste en que está poniendo al límite la capacidad humana de mostrar sentimientos y de las lealtades entre las personas.


En esta película de Lars von Trier se dice que: “el amor lo salva todo”, pero he ahí donde está la gran falacia, se trata de hacer un sacrificio por el otro donde el otro se anula a sí mismo como persona. Es imposible así amar y se llega a la muerte, a la expulsión de la sociedad, que serían las dos cosas más negativas que te pueden pasar.


Me interesa también por eso traerlo aquí porque tiene un planteamiento original para poner al límite la capacidad de los sentimientos humanos y le da una solución radical, precisamente en la negación del ser humano que es lo que termina señalando el límite de la consideración humana. Es un director por tanto que tambien plantea el dificil problema de la dignidad. No he visto todavía su ultima pelicula "el jefe de todo esto", pero por ejemplo "Bailando en la oscuridad" merece una mención propia.


Gracias Vagabunda por pasarte, felices sueños!
Tampoco deberíamos olvidarnos de Buñuel, que buscaba su inspiración en la trascendencia mística o religiosa y a todo lo bueno siempre veía como le atraía todo lo malo, sólo así el podía entender el sentido de lo religioso, y en general en la sociedad este papel él lo veía también mas adelante desarrollado en el papel de la burguesía, clase que era atraída hacia la mediocridad de todo.

viernes, 25 de enero de 2008

mantras de la mente

click to comment
lo dijo Luis Alfonso

¡Que tu Ser vibre en las armonías de los buenos mantrans!
¡Espirituales, mentales, emocionales, materiales!
¡Namaste!
lo dijo
Caronte

Existen mantras para casi todo: para alejar los malos pensamientos, relajarse, prepararse para el trabajo, realizar deportes, aumentar el amor, etc.
La palabra mantra proviene de las raíces sánscritas "manas" cuyo significado es mente y "tra" que significa liberar; por tanto, el mantra es un método de protección de la mente.
Un extravío, una demencia admitida también puede ser un mantra si se repite muchas veces y acaba habituándose, dices bien.
Feliz día!

lo dijo otredad

Con la popularidad que ha alcanzado actualmente la práctica del yoga y demás, es un alivio conocer personas que realmente entienden el significado de conceptos como el que nos traes hoy.
"Pero también hay que ejercitar la actividad física porque ésta está localizada muy cerca de la zona de la memoria en el cerebro y ambas se corresponden beneficiándose mutuamente." Cuán cierto...¡y qué mal por mi parte esa escasa actividad física!
Fascinante como siempre.
Un fuerte abrazo.

lo dijo Pasolosdias

Los mantras son pequeñas oraciones que abren, sosiegan, centran la mente. Yo tuve un amigo budista que me enseñaba mantras, uno era algo así como: om tare totare tare soha, otro era : om tatum...
Además me regaló una especie de rosario, una cadenilla con cuentas, para rezarlos.
Yo antes era medio místico, hasta me sucedían pequeños milagros.
No se sabe hasta donde puede llegar el potencial sin uso de la mente, la Fe mueve montañas, según dicen...

lo dijo Zarza
A veces necesitos más de un mantra, cuesta liberarse, no pierdo la esperanza de hacerlo algún día. Besitos.

lo dijo Atenea
si la mente no se abre se desperdicia, es muy cierto. pero corresponde a una capacidad interna del ser humano que debe cultivarse, llevar su potencial hasta donde más pueda.
saludos y muy intersante la reflexión..

lo dijo sylphides a amig@s
Sí, se llama mantra a una oración corta (estribillo) hindú y budista que se repite muchas veces, como dices bien Pasolosdias.
Amiga otredad, con tu edad no es necesario que te ocupes del cuerpo, en verdad es mejor que te despreocupes, es después cuando somos no tan jóvenes cuando hemos de preocuparnos algo más. Pero tampoco siquiera ahora tenemos que obsesionarnos.
Si se toma vitamina C, como antioxidantes, en naranjas o limones también resulta útil para vencer el efecto de oxidación de las células. Se dice que por el efecto estrogénico de las hormonas femeninas las mujeres vivimos un poco mas que los hombres, y por tanto es aconsejable cuidarse en este sentido, no estresarse demasiado.
Amiga Zarza, gracias por tus palabras siempre fortalecedoras, y en verdad tú dices que consiste en un liberarse mas que otra cosa.
Amiga Atenea, es cuestión de abrir la mente, claro, gracias por pasar. Y también a Luis Alfonso y Caronte, vuestras palabras son como proverbiales, que también vibren vuestros seres con buenos y hermosos pensamientos.
Un beso para todos!

jueves, 24 de enero de 2008

desapego humano


lo dijo Almadeguerrero


El desapego real va mucho más allá que eso que mencionas, quizás, en tu entorno íntimo tenga otro sentido y proyección que aquí desconocemos.

Pero eso, más que desapego son vanidad de vanidades. Egos inflados.

Feliz Semana.

lo dijo Pasolosdias

Es muy posible que tengas razón, y que con el desapego la rigidez lo vaya dominando todo. Hay que apegarse a cualquier signo que le dé sentido al código, algo que reconozcamos como nuestro y podamos decir: es mía porque me he hecho con ella, y la amo.

lo dijo Zarza

El desapego conduce al ogoísmo más puro ? No sé, aunque soy un ser humano, ni yo misma me entiendo. Besitos.

lo dijo Caronte

"Ese desapego es la condición primordial del apego a la inmortalidad", esa me parece una frase genial digna de un dostoievsky. El desapego a todo como un apego absoluto al yo, entendámonos bien.

Saludos amigables!

lo dijo otredad

Caronte tiene toda la razón, y junto a esa frase tu genialidad y dureza en los dos últimos párrafos.

"¿Por qué nos cuesta tanto decir las cosas,descubrirnos de verdad y cuando lo hacemos sólo hay uñas o ceguera?"

Tal vez tengamos en realidad demasiados ojos, más que palabras y más sueños que manos.

Un abrazo, astróloga.

lo dijo sylphides a amig@s

Estimados amigos:

Creo que habéis coincidido en general todos en manifestar que hay un velado egoísmo en el desapego absoluto, por decir así, se ha dicho que vanidad o egos inflados, rigidez en otro caso, temor repentino, o apego a la inmortalidad, nada menos trayendo ecos de la ley divina y el destino en dostoievsky, o ceguera, en ultimo caso, lo cual tendría alguna disculpa si se hace inconscientemente, por ingenuo envanecimiento, por ilusiones infundadas, quien sabe.

Lo cierto es que estamos a tiempo de ver bien las cosas.

Ese temor repentino, surgido de ningún lugar, que crece en nosotros confirma nuestro desarraigo, y en

él resuenan los tormentos de la individuación, el viejo combate entre el caos y la forma.

Y cuanto más deprimido se está, más se petrifican las cosas, a la espera de que se hielen.

Pero no, no logro olvidar los instantes en los que la materia resistía al amor.

Es un combate, no olvidemos entre la forma y la materia (teoría hylemorfista clasica).

Un cordial saludos a todos, Almade guerrero, -que por cierto tengo que decirte algun fleco mas de tu horoscopo-, Zarza, Pasolosdias, Caronte, Otredad, so
is muy sinceros y sutiles, y abrazos!

lo dijo sylphides a otredad

Un poco me veo a mí reflejada en esa descripción que haces con tanta perspicacia,
"arcilla en los ojos y un lagrimeo sucio"
"palos de ciego" y una pared medianera por medio.
¿Por qué nos cuesta tanto decir las cosas, descubrirnos de verdad y cuando lo hacemos sólo hay uñas o ceguera?
Tú dirás, sigue así con tu impresionante don de la vista!
Buenas y felices noches!

martes, 22 de enero de 2008

entre vida y amor



lo dijo lucanor

En todas vuestras palabras, Sylphides, Gourmandise, Otredad, Atenea, hay dulzura, y es hermoso encontrar sentimientos así. Hasta hace poco, yo era muy escéptico sobre la verdad de esos sentimientos, pero tuve la suerte de encontrar una mujer maravillosa que, por fortuna, comparte mi vida. Y os puedo decir que el amor existe. Sé muy bien que "los miedos, las dudas, las inhibiciones forman parte de él", Sylphides. Pero también la lealtad, el cariño y las ganas de compartir cosas. Sin duda hay ingenuidad en ello, y no lo discutiré. Pero uno debe decidir, ¿no creéis? No se puede rebajar el amor a la altura de los derechos y obligaciones o de las tareas de casa. Y en último término es una apuesta por creer.

Un saludo a todos.

lo dijo Pasolosdias

Buenas tardes, Silphide -bueno, ya son noches-. Muy cierto todo eso sobre el miedo. Pero hay más, no sólo hay hombres que tienen miedo a amar, tambien sucede que el amor teme a algunos hombres y mujeres. El amor es posible, como dice Lucanor. Que no le suceda a X no quiere decir que no exista, sólo hay que mirar a Z y a Y, que quizá sí lo tenga. ¡Mira que estoy tonto, hablando aquí del amor como quien explica álgebra!
El Amor... ¿ciencia exacta?

lo dijo sylphides


"Entre vida y amor sacrifica sin dudar la primera, verificando teórica y prácticamente la dolorosa disparidad de ambos términos", dice Cioran.

El amor es una cosmogonía. De ahí sus resonancias metafísicas.

Las emociones nacen de una tensión y un desequilibrio y suelen recorrer el camino de la felicidad por el lado inverso, si se empieza por un sacrificio se puede llegar al final a degustar el verdadero sentido del goce, y es así, y esto no es una corriente hedonista pero ¿qué le voy a hacer?

Gracias, Lucanor y Pasolosdías, sois muy gentiles, un saludo fraterno!

lunes, 21 de enero de 2008

amor ingenuo


lo dijo gourmandise



¡Ay, amor!, dulce veneno,

ay, tema de mi delirio,

solicitado martirio

y de todos males lleno.

¡Ay, amor! lleno de insultos,

centro de angustias mortales,

donde los bienes son males

y los placeres tumultos.

¡Ay, amor! ladrón casero

de la quietud más estable.

¡Ay, amor, falso y mudable!

¡Ay, que por causa muero!

Asi dice en un poema Mariano Melgar.

Saludos y buenas noches.

Genial como siempre!!!

lo dijo Atenea



creo que las musas que me impulsaron a deslizar mis dedos sobre el teclado para hablar del amor como un veneno en mi blog han sido atraidas a tu morada cibernética jiji... estoy de acuerdo con lo que dices, ojalá el amor sea SIEMPRE un néctar, como el elixir de la larga vida, y jamás sea una toxicidad en nuestra alma. besitos!

lo dijo otredad



La naturaleza del ser humano suscita la batalla entre nuestra razón y la mencionada oxitocina, aunque de todo, lo importante es tener claro aquello de "Si comprendiéramos que es un camino de búsqueda y de entrega esperaríamos o nos entregaríamos en su búsqueda."

¿Sabes?Has vuelto a recordarme "Demian": "Había amado, y amando se había encontrado a sí mismo. Pero la mayoría de los hombres aman para perderse en su amor."

Un fuerte abrazo.

lo dijo sylphides a amigas



Estimadas amigas:

qué hermosos comentarios habéis hecho! Puede ser miedo a amar muchas veces lo que hace que no nos entreguemos o que lo volquemos en la mediocridad. Desde luego hay que luchar para que no nos abandonemos y sigamos buscando algo que no se aparte de nosotros mismos, como quería decirnos Hesse en Demian.

Por mucho que no tengamos delante las cosas, aunque seamos incrédulos o desecreídos, en el amor hay que creer, incluso hay que ser ingenuos. Pues los sentimientos casi siempre se manifiestan de un modo inconsciente. Pues los miedos, las dudas, las inhibiciones forman parte de él. Y porque la vida es la que nos posee a nosotros.

Gracias, Otredad, Gourmandise y Atenea, un beso!

lo dijo sylphides

Está bonito volver a la edad de la inocencia, uno siempre es inocente de aquello de lo que se enamora, pero una cosa es la inocencia y otra es la simpleza (que es lo que ocurre en el Cándido de Voltaire), y normalmente la persona inocente nunca sabe que lo es.
Son de esas cosas que no se enseñan sino que se aprenden.
felices noches!

domingo, 20 de enero de 2008

aarnio y la reconstrucción de la racionalidad





En su reconstrucción de la racionalidad a partir de la razonabilidad (The rational as reasonable, 1987), Aarnio ha hablado de dos tipos de conexión entre la idea de aceptación racional y el concepto wittgensteiniano de “forma de vida”. Por una parte, el concepto de forma de vida orienta hacia un mejor entendimiento de lo que significa la interpretación, que deberá comprenderse no sólo como fenómeno semántico, sino sobre todo como fenómeno pragmático perceptible en el contexto de una forma de vida determinada. “El análisis del lenguaje es el análisis de la forma de vida”, indica Aarnio remontándose a Wittgenstein. “Así podemos entender nuestra vida, cuyos actos componen nuestra forma de vida”.


Por otra parte, el concepto de forma de vida redefine la noción de valor. Dos individuos que comparten una misma forma de vida comparten también un mismo lenguaje que permite el entendimiento mutuo. Ello no implica que las dos representaciones del mundo de cada uno de esto individuos coincidan, sino que lo normal es que cada uno tenga sus preferencias valorativas, las cuales tratará de justificar racionalmente a través de diversos tipos de juegos lingüísticos. Pero se podría decir, volviendo a usar la terminología wittgeinteiniana que tales preferencias valorativas tienen un parecido de familia que facilita la intersubjetividad de los valores: “Los valores reciben específicamente su intersubjetividad de las formas de vida. Una forma de vida es siempre de alguna manera y en cierta medida una materi acomún. Es específicamente una forma de vida. Un individuo no puede desarrollar por sí mismo una forma de vida completamente privada, una representación del mundo y un lenguaje propios. Haciéndolo se aislaría a sí mismo de la interacción social. Es el aspecto común de la forma de vida lo que hace que la comunicación -y a través de ella, la interacción- sea posible”. (Aarnio, 1987).


El sistema de valores común para quienes comparten una forma de vida constituye el presupuesto de racionalidad para la interpretación y la argumentación jurídica. Pero ante la comunidad jurídica como auditorio universal, la racionalidad se materializa a través de la persuasión.


Ya antes de que Perelman situara la persuasión en un plano diferente al del convencimiento, Wittgenstein afirmaba en “Sobre la certeza”: “El juez podría bien decir: 'ésta es la verdad -en lo que yo puedo conocerla-. Pero ¿qué efecto tendría esta coletilla? ('más allá de cualquier duda racional'). ¿Es erróneo dejarme guiar en mis acciones por las proposiciones de la física? ¿Debo decir que no tengo ninguna buena razón para hacerlo? ¿Y no es precisamente esto lo que llamamos una 'buena razón'? Supongamos que encontramos gente que no lo considera como una razón plausible. Diciendo que esto es erróneo, ¿no nos salimos ya de nuestro juego lingüístico para combatir el de los demás? ¿Y tenemos razón o sería injusto combatirlo? Naturalmente apoyaremos a nuestro modo de proceder con todo tipo de palabras de orden (de eslóganes). He dicho que “combatiría” el otro juego lingüístico, pero entonces, ¿no le daría quizá razones? Ciertamente sí, pero ¿hasta dónde llegan? Cuando acaban las razones está la persuasión” (Wittgenstein, 1969).


sylphides
~
concepciones del derecho

sobre lógica y física



Mas lo cierto es que semejantes pretensiones del empirismo lógico se han visto contestadas desde sus mismos presupuestos lingüísticos, esto es, en el contexto de la propia filosofía analítica de la ciencia.

Un autor como Quine, según se sabe, ha contribuido a cuestionarlas, comenzando por cuestionar esa tajante división -ese khorismós- entre las dos clases de principios que nos servían antes de ejemplo, división que Quine describió un día como un simple “dogma del empirismo lógico”. Por lo pronto, no está del todo claro que la segunda ley de la mecánica clásica constituya un enunciado empírico, esto es, un enunciado que nos informa acerca de lo que acontece en el mundo extralingüístico, el cual por tanto habría de ser capaz de desmentirlo. ¿Cómo podría en efecto desmentirlo? No hemos de olvidar que “fuerza” y “masa” representan magnitudes teóricas, por lo que -dentro de esa teoría que es la mecánica clásica- hay motivos para dudar de que ningún hecho pudiera desmentir aquella ley.

Las magnitudes teóricas que intervienen en su formulación no se pueden medir más que en función de la teoría dentro de la que se articualn, de suerte que ninguna medición podría atentar contra tal ley dentro de tal teoría, pues semejante desajuste sería invariablemente atribuido a un

error de medida más bien que a la inadecuación de la ley misma.

Pero es que hay más. ¿Pues no cabría pensar que, más que un enunciado empírico, la segunda ley de la mecánica clásica sea simplemente una definición, es decir, una estipulación lingüística tendente a permitir que Newton dejara sentado el uso que iba a hacer en su teoría de un término clave como “fuerza”? En cuyo caso, ni tan siquiera habría lugar a confrontarla con los hechos.

Y, en general, cualquier principio científico podría ser puesto al abrigo de esa confrontación con sólo interpretarlo como una definición, lo que equivaldría a desplazarlo desde aquella zona periférica del sistema teórico en que el lenguaje contacta con la realidad al interior de dicho sistema, esto es, a aquella zona del mismo en que -lejos ya de la realidad- sólo queda el lenguaje.

Como contrapartida habría que añadir que ningún principio científico puede considerarse inmune o a salvo de revisiones, aunque no fuera más que porque toda definición es susceptible de ser sustituida por otra definición, según veíamos antes que ha ocurrido con la definición de “fuerza” a lo largo de la historia de la física.

¿Podría ocurrir algo por el estilo en la historia de la lógica, esto es, es concebible que un principio lógico -como el de tercio excluso- vea suspendida su vigencia y sea apeado de su condición de tal?


Vamos a ver que sí, al menos desde una concepción paratáctica de la lógica como la que estamos ahora considerando, para lo cual esos principios se hallarían a la par con los demás principios de la ciencia.

~

El principio de tercio excluso presupone un principio lógico más básico -el llamado “principio de bivalencia”- que asegura que un enunciado tan sólo admite la doble posibilidad de ser considerado verdadero o falso, sin que quepa una tercera posibilidad al respecto.

Y es en virtud de ese principio por lo que el de tercio excluso se considera normalmente una “verdad lógica”: dado que X sería siempre un enunciado verdadero cuando no-X sea falso, y dado que la disyunción de esos dos enunciados es siempre verdadera con sólo que lo sea uno de sus miembros, el principio de tercio excluso será por tanto siempre verdadero. ¿Pero no cabría acaso discutir la estricta vigencia del principio de bivalencia y, por ende, la del principio de tercio excluso?

Imaginemos que, en lugar, de preguntarnos si es cierto que hoy llueve o no llueve, nos da por preguntarnos si es cierto que “mañana lloverá” o “no lloverá”, donde esos enunciados son los que en literatura filosófica se conoce como enunciados relativos a “futuros contingentes”, es decir, relativos a acontecimientos futuros que igual podrían tener lugar que no tenerlo, puesto que no es ni necesario ni imposible que acontezcan. Si fuésemos pacientes, lo natural sería aplazar nuestra respuesta a aquella pregunta hasta mañana, esperando a ver qué pasa.

Pero la gracia del asunto está en abandonarse a la impaciencia lógica -aun si quizás no demasiado “lógica” para la gente que se tiene a sí misma por sensata- e intentar responderla, como mejor podamos, hoy.

Alguien podría decir que no sabemos si mañana lloverá ni si no lloverá, pero que sí sabemos que ocurrirá una cosa u otra: tertium non datur.

Y quien diga así estará admitiendo, como nosotros antes lo hemos hecho que la verdad del principio de tercio excluso se halla en función de la verdad de sus dos enunciados componentes, que en nuestro caso ya sabemos relativos a futuros contingentes.

Ahora bien, quien diga hoy que el enunciado “mañana volverá” es verdadero parece estar diciendo que es necesario que mañana llueva, de la misma manera que quien diga hoy que ese enunciado es falso, lo que convierte en verdadera a su negación, parece estar diciendo que es imposible que ocurra tal cosa.

De suerte que, tanto en un caso como en otro, nos la habríamos con futuros necesarios e imposibles, no con futuros contingentes, lo que contradiría palmariamente nuestra hipótesis de partida.

La paradoja de los futuros contingentes puede dar la impresión de una paradoja algo tonta, mas sus implicaciones están lejos de ser instrascendentes.

Suspender la vigencia del principio de tercio excluso, por aludir a una prmera de esas implicaciones posibles, no es ninguna tontería.

Es lo que hace por ejemplo el matemático intucionista cuando rehusa pronnciarse acerca de la naturaleza par o impar de la enésima cifra decimal de un número irracional hasta no haber ejecutado todas las operaciones necesarias para obtener aquella cifra.

Como tampoco es ninguna tontería la suspensión de la vigencia del principio de bivalencia, que

equivale en rigor a la introducción de la “indeterminación” como un tercer valor a añadir a los dos valores clásicos de la “verdad” y la “falsedad”.

Una lógica trivalente de ese género pudiera ser la preferida por el físico que desea formalizar la relación de incertidumbre que para la mecánica cuántica se deriva de la imposibilidad de determinar simultáneamente la posición y la velocidad de una partícula subatómica.

Pero, por lo demás, entre la verdad absoluta y la absoluta falsedad caben no sólo uno, sino múltiples peldaños intermedios, desde enunciados “más verdaderos que falsos” hasta enunciados “más falsos que verdaderos”, lo que abre paso a la construcción de lógicas trevalentes, pentavalentes, etc., etc. Y si admitiéramos una infinidad de esos peldaños, nada habrá que nos impida construir lógicas infinitamente polivalentes.
~

liberación


Estimados amigos:

vuestros comentarios son tan interesantes que me hacen pensar también a mí.

Fíjate por donde, Cyrano, vamos a coincidir por una vez en que la libertad tiene algunos topes, que tú consideras en el concepto de moral, y yo entiendo esto certeramente. En cuanto al sentimiento de culpa lo considero algo más intrepersonal o intransferible, así como algún tipo de revelación mística. He conocido amigos, familiares que dicen también haber recibido ese don del conocimiento divino pero también te diré que personas muy creyentes después en sus vidas ello no les ha impedido vacilar o dudar, por tanto hay que agarrarse a donde se puede.

Vagabunda: me parece que sentirte libre no tiene que suponer no sentir algún tipo de atadura, si ello lo has asumido con noble dignidad y voluntad, la libertad quiere decir casi siempre poder de asumir una responsabilidad y en todo caso, mas que libertad de hacer, se trata de un poder de liberarse de lo que "no" queremos hacer (libertad así llamada negativa).

Como decía el poeta Cernuda: "Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien."
Y Pasolosdías, pues yo también recojo de ti tu intuición maravillosa.

Y Otredad, te has quedado con la parte más personal de mi historia. A veces yo no sé ya cómo llegar a las personas, me doy cuenta que por ahí hay algunos que les gusta que yo me enfade y eso ya parece que les da una tranquilidad cuando me ven así, porque se dan cuenta despues de todo de que me preocupo por ellos.

Gracias por venir y un beso muy grande para todos!

Estimado júcar,

last but not least, siempre me dejo algun comentario para el final, porque intento recordarlos de memoria, pero en fin quiero también agradecerte tu paso por aquí y como tú dices es una opinión personal y subjetiva lo que podemos conocer de la libertad.

El hombre ama la libertad pero la teme, podemos limitar el poder del destino, liberarnos de ciertos miedos, pero ciertos modos o tradiciones reposan como una losa condicional. No podemos renunciar al deber o a nuestras responsabilidades, en fin, es como tu dices una labor de sopesación de todo.
un beso!

miércoles, 16 de enero de 2008

un mito de la decadencia



En el siglo veintiuno es más fundamental afirmar lo que nos une en un proyecto común, hay más de común que de diferente, en los hábitos folcklóricos se ha exagerado el hecho diferencial, la historia es un compromiso también con la libertad y la justicia y hay que conocerla para trazar el horizonte. Una España de herejes y de inquisición, de nacionalismo y de centralismo, ésa ha sido la historia de España, la chapuza de la modernidad, la España caínita frente a la facilidad de hacer amigos, hay una falta de rigor pero nos sentimos bien, hay hospitalidad, nos interesa lo que le pasa al vecino, esta España es una España inacabada, hay que pensarla como un proyecto de futuro, no como pasado, como una nación viva, no de las cortes de Flandes ni de la división de Trento, ni de la bandera militante, no cuenta el pasado, cuenta el futuro, el plebiscito diario.


Siempre ha habido un mito de decadencia en nuestro país, no viene de ahora sino desde Roma, del año ochenta y dos antes de Cristo, siempre nos ha seguido la historia de un país negro, el mito de una decadencia. Los perderdores de la guerra civil fueron los anarquistas en verdad, porque ellos renunciaron después a un partido, ahora los perdedores son las víctimas de Eta. No, no tenemos que pensar en eso sino como pasado y abrir un proyecto nuevo.

de la intolerancia y los intolerados, las Tres Culturas



de la intolerancia y los intolerados

A través de la historia de la filosofía la figura del cordobés Moshé Ben Maimón siempre me interesó, digamos que por razones patrióticas, esto es, en la medida en que una asume de buen grado su condición de vástaga de un país de “judíos, moros y cristianos”. Un país que los primeros consideraron desde antiguo como suyo y les fue dado a trechos vivirlo como tal. Así fue en la Córdoba musulmana al menos hasta la oleada de fanatismo religioso que trajo consigo la invasión de los almohades en el siglo XII o en el Toledo de un siglo más tarde, el Toledo del cristianísimo rey Alfonso X el Sabio, de quien era reconocida su fama de piadoso y era buen rey consciente de haber nacido en una península de filósofos como lo testimonia el caso de “Aristotil”, a quien le atribuye la naturalidad española y “salió moço de su tierra y fuesse para Grecia”.
Como quiera que sea y por más que alardee de cuna de filósofos, la península ibérica ha solido ser tierra asaz inhóspita para nuestros colegas del pasado, y el afán de saber no ha sido el único motivo que obligó a expatriarse a tantos de ellos o a sus respectivas familias.
En el caso de Maimónides fue empujado a hacerlo por causa de la intolerancia, gracias a la que aquél acabaría convirtiéndose con el tiempo en cortesano del sultán Saladino en la ciudad de El Cairo.

Pero análogas razones llevaron a otra familia de judíos, varias centurias después, a trasladarse desde la localidad burgalesa de Espinosa de los Monteros a Portugal y luego a Holanda, lo que explica la presencia de Baruch de Spinoza en la comunidad hebrea de Amsterdam, de la que también, ay, se vería segregado por blasfemo.

Y un filósofo menor pero conmovedoramente atormentado, como Juan Luis Vives, había ya arrastrado una centuria antes su desazonador exilio de descendiente de conversos por esos mismos Países Bajos.

Y me acordé de una novela acerca de Juan Cabezón Castilla, que era un hijo de Israel, que tras el Edicto de expulsión de los Reyes Católicos, se embarca como gaviero en la nao Santa María de Cristóbal Colón buscando hallar mejor fortuna en lo que luego sería América. El largo brazo de la persecución no dejaría de alcanzar tarde o temprano a estos escapados, algunos de los cuales, refugiados en Curaçao bajo la protección de los tolerantes holandeses, volverían a embarcar allí con destino a Nueva York, por aquel entonces Nueva Amsterdam.

Pero no es cosa, en fin, de denigrar a los españoles. Siendo admiradora de fray Bartolomé de Las

Casas, los españoles no prodigaron a los indios un trato más infame que el que acostumbraban a prodigarse entre ellos mismos, lo que prueba al menos su sentido de la equidad.

Algo que queda reflejado en una obra apasionante cuya lectura os recomiendo -”La conquête de l'Amerique”, de Tzvetan Todorov-, en la que se describe, con perspicacia histórica y profundidad filosófica poco comunes, el drama del “descubrimiento del otro”, un descubrimiento capaz de transformar el cruento enfrentamiento en interacción comunicativa.

En México, por ejemplo, en una inscripción en la Plaza de las Tres Culturas, en el corazón de la antigua Tenochtitlán, dice lo siguiente: “El 13 de agosto de 1521, heroicamente defendido por Cuauhtémoc, Tlatelolco cayó en poder de Hernán Cortés. No fue triunfo ni derrota. Fue el doloroso nacimiento del pueblo mestizo que es el México de hoy”.

Y en cuanto a la intolerancia los propios españoles la han seguido sufriendo de otros españoles hasta ayer mismo, por resumir en dos palabras las trágicas consecuencias de una guerra civil.

Eso fue lo que le permitió la “empatriación” mexicana de un maestro como José Gaos, otro filósofo desterrado -o “transterrado” como él prefería decir tratándose de México, uno de cuyos textos juveniles, antes de su desarraigo y nuevo arraigo, es “Filosofía de Maimónides”. Al parecer el texto obedecía a un proyecto orteguiano de elaboración de una Historia de la Filosofía en España, en el que no podía faltar lógicamente el pensamiento judío. Y parece ser que Gaos estaba estudiando árabe antes de partir, por ser la lengua árabe en principal vehículo de expresión de dicho pensamiento sefarad.

Maimónides escribió una “Guía de Perplejos”, donde se incorpora la versión española del título como “Guía de los descarriados” que se limita a reproducir el título francés de Munk “Le guide des egarés”. Pero la obra de Maimónides no fue escrita para los que hubieran echado a andar por un camino equivocado, sino para los que, bien encaminados, se encuentran desconcertados, inciertos, confusos; en una palabra, perplejos ante una encrucijada que les oprime el ánimo... La encrucijada que plantea el abandono de la razón o de la fe causa una perplejidad ecompañada de un dolor violento y una insostenible situación vital que exige un guía o una guía que lleve por el camino de la resolución, y este trabajo lo debe realizar el filósofo que se avoca a mostrar la conciliación posible, porque para Maimónides la fe y la razón están inseparablemente unidas.

Aunque al talante racionalista del hombre moderno lo que le caracteriza es haber dejado de vivir la razón y la fe como algo inseparablemente unidos. La razón podría seguir siendo definida de manera que resulte compatible con la fe pero semejante definición se tornará vacua sino incorpora un componente vivencial que sólo la experiencia histórica puede suministrarle, en cuyo caso lo más probable es que la definición se torne ociosa.

Pues el ocaso de la religión y su relevo por el racionalismo filosófico está muy lejos de haber sido un suceso de parva significación y la conmoción originada por su impacto en la conciencia humana se prolonga problemáticamente hasta nuestros mismísimos días.
~

Mas el precedente elogio de la perplejidad y de la tolerancia ¿qué diablos puede significar aquí? Al fin y al cabo, España pasa por ser un país proverbialmente intolerante.

Por increíble que parezca intolerantes fueron allí hasta los propios hebreos convertidos a la fe cristiana, como aquel tristemente famoso Salomón Haleví, rabino que llegó a obispo bajo el nombre de don Pablo de Santa María y alentó matanzas de sus hermanos de raza en la Castilla de finales de la Baja Edad Media. Como se ha dicho con amargura a propósito del socorrido tema de las dos Españas: “Desengáñese, amigo. España sólo ha habido una, la intolerante. Y cuatro o cinco intolerados.”

Salvo los “cuatro o cinco intolerados” de que hablaba un viejo profesor -en realidad, algunos más de acuerdo con el censo de heterodoxos de don Marcelino Menéndez y Pelayo, que se prolongaría, prolongando la herencia de nuestros ilustrados, hasta incluir a los filósofos del exilio latinoamericano-, los españoles no supimos ser sabios.

De nosotros se cuenta que dijo Nietzsche, ya postrado, esta frase inquietante: “España, España es un pueblo que ha querido demasiado”, de hecho quiso ser como dios y poseer la clave para imponer a propios y extraños la tiranía de un único dios.

Pero me malicio que vamos a necesitar de aliviarnos de la bochornosa indigestión de pasadas glorias y debería exigir un serio examen de conciencia, como si los problemas que agitaron a cristianos, moros y judíos fuera un transunto del universo de hoy que multiverso y aglomerado se agita bajo una civilización de veras planetaria.

sylphides
~
un mito de la decadencia

el problema israelita

teoría del mal y la culpa



Si yo no me hubiese desprendido de mi ego de esa forma, en que negué a lo que más quería, tal vez ahora yo arrastraría otras culpas, porque la vida es así, y no creas que formarme una identidad mía haya sido lo más importante, sino el ser coherente con la realidad de la vida y no ser creo egoísta.

La conciencia de culpa podría definirse como algo que no me afecta sólo a mí, en cuanto a infractor, sino al universo entero, al que amenaza con sumirlo en el caos y la incertidumbre.

Se caracteriza como la ansiedad que sigue a la transgresión no de una ley sino de un tabú.

Para Freud, por ejemplo, no hay duda que el tabú se ubica en el reino de lo sagrado.

Los tabúes por tanto son cultura y también viceversa, pues “una cultura sin tabúes vendría a ser algo así como un círculo cuadrado”. Y a nuestra participación en ellos le debemos la misma distinción moral entre el mal y el bien, por este orden.

Pues de acuerdo con las premisas que anteceden sólo conoceríamos lo que es bueno conociendo primero lo que es malo, así como únicamente conocemos lo que es malo al realizar el mal nosotros mismos.

El hecho de unir el sentimiento de culpa al hecho religioso pertenece a una época, que marca también la ruptura con lo religioso en el hombre. Freud suele hablar también de represión, de inhibición de inclinaciones naturales, de fuerzas o pulsiones que están reprimidas en el inconsciente, para darle un sentido científico y despojado del sentido cristiano de culpa.

Pero en el sentimiento de culpa, del que yo hablo al principio, y del que digo que rompo con algo muy querido para unirme tal vez a otro algo, veo ese mismo lazo del que hablaba Freud o Kolakowoski, o del que habló Dostoiesvky cuando dijo: "Si dios ha muerto todo está permitido". Y veo también la huella de Jung cuando inaugura un concepto del inconsciente colectivo como arquetipo de una huella que está en un antepasado mitico del hombre.

Es decir, hemos renunciado a algo para darnos a otro algo más poderoso y que no tiene que ver con un ego personal o un individualismo sino con algo que trasciende a todo eso. Algo que respondería a un inconsciente colectivo, tal vez una pulsion mayor, incluso el mismo sentido de la vida, o la pulsion de matar, aunque no es este el caso normal de una ilusión joven.

No, en mi caso, a pesar de que el sentimiento de culpa nació con una gran desilusion y un abandono y mas que eso con una perversion radical de mí y de lo que yo creía que podía tener de lo mejor en mí. Pero si hay algo que se ha roto, yo no creo que haya sido del todo. Cuento aquí con las palabras de María Zambrano cuando nos dice que en el paso de la vida al final nos volvemos a reconciliar con las huellas de nuestro pasado.

sylphides

~
freud, una teoría sobre la culpa

la represión de la libido, freud, y jung
click to comment