miércoles, 29 de septiembre de 2010

la devaluación del dolar

plaentxi
Vaya, vaya…
Que bueno que ya empezamos todos a vislumbrar las consecuencias de esas políticas heterodoxas de la Reserva Federal y el Tesoro americano que tanto se han aplaudido por estos lares. Hasta José Carlos y Krugman nos reconocen ahora que la perspectiva estadounidense es muy preocupante y que el impago y la devaluación es lo único que se divisa en el horizonte. Pero hagamos un poquitín de aritmética para ver el callejón sin salida en la que se encuentra el gigante americano.
Este año Estados Unidos tendrá aproximadamente 13 billones de Dólares de deuda.
El pago de los intereses de la deuda supondrá aproximadamente el 4.63% del presupuesto o unos 165.000 millones de Dólares.
Eso supone un tipo de interés efectivo del 1,27%.
¿Qué sucedería si los tipos de interés se normalizaran al 5%?
Eso supondría 672.000 millones de Dólares en pagos de interés o sea que 500.000 mil millones más. Dicho en otras palabras, el pago del interés de la deuda supondría el 52% de toda la recaudación de impuestos.
Eso siendo optimistas y suponiendo que no se va a añadir más deuda pero sabemos que la misma oficina de presupuestos del congreso americano dice que se añadirá un billón de Dólares de deuda anual por lo menos durante una década más.
Sí añadimos 5 billones de Dólares de deuda durante los próximos cinco años, tendríamos una deuda total de 18,5 billones de Dólares que a un tipo de interés del 5% supondría 925.000 millones de Dólares o lo que es lo mismo, la práctica totalidad de la recaudación de impuestos iría a pagar los intereses de la deuda.
Pero Bernanke y su séquito de seguidores economistas heterodoxos nos ofrecen la solución mágica. Imprimimos dinero y compramos la deuda nosotros mismos. De esa forma mantenemos bajos los tipos de interés. Menudos genios de la economía. Fantástico. Han transformado la máquina de imprimir billetes en un artefacto prodigioso de movimiento perpetuo. ¡Hurra! ¡Eureka!
Pero… hay un pequeño problemilla con el que no contaban. Miren lo que está pasando con los precios de materias primas de alimentación:
Precio del maíz: 54% de aumento en tres meses
http://market-ticker.org/akcs-www?get_gallerynr=231
Precio del trigo: 63% de aumento en tres meses
http://market-ticker.org/akcs-www?get_gallerynr=232
Precio de la soya: 26% de aumento en tres meses
http://market-ticker.org/akcs-www?get_gallerynr=236
Precio del arroz: 31% de aumento en tres meses
http://market-ticker.org/akcs-www?get_gallerynr=234
Precio de la avena: 83% de aumento en tres meses
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Que los pobres se mueran de hambre pero que los balances bancarios permanezcan hinchados y enteros. En eso consiste la estrategia Bernankiana.
Como nos dice José Carlos estás cosan llevan más tiempo de lo que uno cree pero luego suceden de golpe. Solamente hace falta que estos señores uniformados del primer plano que también comen trigo y arroz se pasen al otro bando.
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No queda mucho tiempo y arriba he puesto las matemáticas que lo demuestran. Si quieren sobrevivir, estas élites financieras que están rigiendo nuestros destinos tendrán que darse cuenta que la prosperidad no depende de los deseos del Gobierno y los Banco Centrales. Tendrán que entender que la prosperidad solamente se puede conseguir a la vieja usanza que es ahorrando y con la formación de Capital para ser utilizada en la inversión productiva. Con trabajo duro que uno hace produciendo valor tangible. Creando productos que el resto del mundo quiere comprar y no imprimiendo billetes, causando inflación en productos básicos, manteniendo precios ficticios de activos inmobiliarios y manipulando mercados.
Ya es hora de decir la verdad a la gente y dejarnos de espejismos. Los únicos que ven la realidad son ortodoxos como Axel Weber. Si los Bernankistas inflacionistas se salen con la suya tendremos caos y revolución.
Si los ortodoxos triunfan tendremos mucho sufrimiento y dolor pero habrá esperanza de volver de nuevo a la prosperidad y mantener los cimientos de la sociedad si el sacrificio es compartido.
Juan Carlos
¿La devaluación del dolar presionará a China a apreciar su moneda o seguirá su trayectoria con el dolar?, si se depreciara aumentará la inflación en el país provocando un coste social y productivo, no obstante incrementaría sus exportaciones ahogando un poco más a nuestra Europa desvertebrada y a Japón que ya no sabe que hacer. Si China no aprecia su moneda aumentará su gravedad económica como un agujero negro desvastando todo lo que tiene a su alrededor, porque aún tiene recorrido para aguantar la devaluación.
La crisis sigue su trayectoria que comienza mucho antes de 2007 y es el punto de gravedad económico y político a favor del gran gigante.
Esto supone, y tiene toda la razón plaentxi, que los países menos ortodoxos como EEUU y buena parte de Europa por no poner nombres, han de ajustar su nivel de vida a la nueva situación de equilibrio mundial, donde no basta el nivel monetario y los balances bancarios sino el poder adquisitivo de sus ciudadanos.
Este nuevo nivel de vida, o consciencia real de la situación y no quiero ser pesimista, también es una lección para los trabajadores, para los que disfrutamos de un contrato laboral, pues las condiciones han de equilibrarse para poder efectuar un reparto del trabajo y lo que es más importante, crear las expectativas de negocio para que nazcan nuevas empresas.
Todos estos cambios son dolorosos y necesarios mientras no haya una verdadera dirección global de la economía que permita la igualdad de oportunidades laborales y de negocio en todo el mundo, así como oportunidades de realización para toda la población mundial; como dice José Carlos, estos objetivos pueden estar en mente de todos pero a largo plazo (o lo que es lo mismo: no tener fecha) pero la realidad puede presionar para que las cosas se realcen de sopetón.
El mundo está viviendo en el borde del preciicio desde hace meses y la situación puede caer para un lado o para otro con realidades divergentes, por eso hoy es más necesario que nunca la unión de fuerzas políticas, sociales e intelectuales para hacer un planteamiento serio sobre el mundo que queremos para vivir, y esto supone cambios y sacrificios, lo que pasa es que los sacrificios no pueden medirse todos por igual, no es lo mismo quedarse sin empleo o sin negocio con 40 años, que perder el patrimonio ahorrado, que te bajen el sueldo en un 5% o el que te suban el IRPF un 2%, hay para todos pero se deben poner prioridades para defender la vida y la dignidad.
José Carlos Díez
@ Plaentxi el PIB americano es de 15 billones y la presión fiscal del 25% por lo que el estado recauda 5 b. incluso en el escenario más negativo que das un billón de pago de intereses sería un 20% de los ingresos fiscales no el 50% como dices. Subir la presión fiscal 5 puntos equivaldría a unos 700.000 millones y aún así seguirían pagando muchos menos impuestos que los europeos.
La situación es complicada pero no apocalíptica

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